Compartiendo Libertad

Aún recuerdo cuando conectaba a Internet con mi primer módem a una velocidad de 28.80 kilobytes por segundo hace apenas quince años. Hoy navego con una ADSL de 20 Megas y según las previsiones, para el 2015 será habitual en España el moverse en la red a velocidades de 100 Megas, es decir cinco veces más rápido de lo que lo hacemos en la actualidad.

Por su parte también se está desarrollando la telefonía móvil de cuarta generación que nos permitirá para esa misma fecha el poder navegar a una velocidad de 50 Megas por segundo.

Todo esto se debe en gran medida a las nuevas aplicaciones, y según el estudio realizado, se augura la expansión de la mensajería instantánea en el móvil (las operadoras ya han acordado adoptar un estándar compatible con las distintas redes 3G); el vídeo bajo demanda, que se generalizará a mediados de la próxima década; igual que la distribución de software a través de internet, en un nuevo modelo de negocio; la TV en el móvil, la telefonía por la Red (VoIP); aún mayor popularidad de las redes P2P...

De todas formas hay que tener en cuenta que la velocidad va en proporción al tamaño de los archivos ahora descargamos vídeos de un giga, cuando las tasas de transferencia sean de 100 Megas segundo, nos encontraremos con archivos sustancialmente más grandes para su descarga.

A pesar de todo ello y parafraseando de Don Hilarión, "La ciencia avanza que es una barbaridad".

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